Las célebres botas de agua Hunter nacieron en 1856, en el Reino Unido, lugar donde suele llover. Se las hemos visto a numerosas famosas, motivo por el cuál se pusieron muy de moda y hoy son un must para loc chavorrucos! Aunque no necesariamente tengan que ser de esta marca, algo parecido será opción para estos días de lluvia… conoce un poco más de su historia.
Se las hemos visto a Lady Di, a Rihanna y hace unos años a media oficina en los días de perros (la culpa de todo la tiene Kate Moss).
La compañía Nort British Rubber Company las fabricaba desde 1855 junto a neumáticos, bolsas de agua caliente, peines y así. Lo que habían hecho era adaptar un modelo de bota de piel, la que el duque de Wellington había solicitado en 1817 a su zapatero para calzar tanto en batalla como en ocasiones formales y que adquirió su apellido como nombre popular.
La primera Guerra Mundial disparó la producción de aquella primitiva Hunter: hasta 1.185.036 pares salieron de la fábrica en funcionamiento para surtir a las tropas que batallaban las trincheras. Durante el siguiente conflicto a escala global el 80% de la producción de la empresa se destinó a equipamiento militar, donde se incluían máscaras antigás, salvavidas…